2019-01-15
En general cuando hablamos de la existencia de insectos robóticos, lo relacionamos con el futuro lejano, una fantasía o parte de la ciencia ficción.
Transformarlo en realidad parece algo no tan sencillo, pero en este caso fue posible.
Estamos hablando del caso de un minúsculo robot volador, llamado Robofly.
Pesa menos de un gramo y puede conseguir esta hazaña, volar. Hasta este momento, cualquier robot de este calibre se veía imposibilitado de elevarse siquiera un poco debido al peso mismo de la batería de alimentación necesaria; o en el caso de los modelos que conseguían hacerlo, éstos tenían una movilidad limitada ya que estaban alimentados a través de cables.
El minúsculo robot volador Robofly es el primero de muchos que vendrán con el paso del tiempo y que no dependen de una batería para poder volar.
Según explican desde la Universidad de Washington, quienes son los encargados de llevar a cabo este proyecto, la clave está en poder brindarle de forma indirecta la energía que necesitan para batir sus alas.
El sistema de este minúsculo robot volador consiste en una pequeña célula fotovoltaica que funciona de antena y que recibe un rayo de luz laser, el cual se transforma en electricidad. Por lo que obtiene 7 voltios a través de la luz laser y se transforman en los 240 V necesarios para producir el movimiento de las alas por medio de impulsos.
Este tipo de robots podrían ser útiles algún día en tareas como la vigilancia o detección de situaciones peligrosas como fugas de gas en tuberías o refinerías, con la ventaja de su bajo costo con respecto a los drones.
En la actualidad consiguen mantenerse en vuelo, siempre y cuando la luz láser alcance a la célula fotovoltaica, pero al no contar con una función de seguimiento, al cabo de un rato y al alcanzar cierta altura, el minúsculo robot volador se mueve del recorrido del láser y vuelve a aterrizar.
Por ahora los profesionales encargados han iniciado los trámites para el patentamiento del minúsculo robot volador, pero su máximo interés es la investigación.
Tienen fe en que en un futuro podrán aplicar un sistema de seguimiento automático que logre mantener al rayo de luz láser, dirigido hacia el robot en todo momento; aunque esto parece diferir un poco con la idea de poder utilizar los robots en interiores, o a una distancia considerable; por lo que también se está avanzando en novedosos tipos de baterías ultra livianas.
Es tanta la confianza que le tienen al proyecto que creen que por su bajo costo y relativamente fácil producción, serán una excelente opción a tener en cuenta para la exploración espacial.
Se podrán enviar al espacio una gran cantidad de estos pequeñines sin importar que algunos se dañen ya que seguiría habiendo muchos otros para encargarse de las tareas.